Mi historia

Mi emprendimiento comenzó en 2020, aunque la idea surgió al ser madre y querer realizar un trabajo que me permitiese conciliar mi vida profesional con la crianza de mis hijos. Formar una familia y estar presente en el día a día de mis hijos era y es mi gran ilusión. 

En 2020 creé mi marca y mi perfil en Instagram donde comencé a publicitar mis primeras creaciones. 

Con algunas clases y mucha práctica comencé a ampliar mi catálogo  y a vender mis productos. 

Durante estos años cada vez son más las clientas que confían en mí, y mi marca ya tiene una identidad propia. 

Ahora quiero dar el paso de vender mis creaciones de una forma más cómoda a través de la web.

 Me apasiona crear cosas bonitas, únicas y personalizadas. Desde pequeña me ha gustado hacer cosas especiales, hechas a mano con distintas técnicas para hacer un regalo especial a amigos y familiares. Siempre disfruté con el arte en general, la pintura, la fotografía, la música, la danza...

 Mi madre durante años me animó a aprender a usar su máquina de coser, pero era algo que pensaba que no era para mí y que sería muy complicado. 

En 2020, en plena pandemia, la rescaté del garaje y decidí aprender a usarla para hacer unos baberos para mis hijos Martín y Carlos.

 Después recordé las bolsas de tela que usaban mi abuela y mi madre para guardar el pan y me pareció una maravillosa idea de punto de partida para La Pequeña. 

A partir de ahí, fueron surgiendo nuevos artículos donde la máxima siempre fue cuidar hasta el último detalle para que los productos sean pequeños tesoros que perduren en el tiempo y, por lo tanto, piezas únicas. 

Me apasiona crear y coser. 

Para mi es una terapia y me hace muy feliz el proceso de cada pieza que realizo. 

Te doy la bienvenida a mi mundo.

Gracias por estar ahí.

Inma